Tras la vuelta de las vacaciones y el fin del verano la revisión de los audífonos es una parada obligatoria como medida preventiva para estos dispositivos.

Con el fin de evitar posibles averías que provocan la suciedad o humedades que ‘sobreviven’ a la limpieza diaria que se realiza en el hogar, la Plataforma Audiológica GEA recomienda esta revisión.

El objetivo no es otro que comprobar los elementos esenciales y funcionamiento general del audífono aunque también se recomienda una revisión auditiva.

Los 4 motivos por los que el especialista debe revisar los audífonos después del verano son:

- Primero, porque tras una época en la que las temperaturas extremas y la humedad de playas y piscinas, entre otros motivos, hacen que sea necesario explorar el correcto funcionamiento del chip y otros componentes del audífono.

- Segundo, porque tanto el cerumen como la arena pueden obstruir los conductos en algunos audífonos y en ocasiones las limpiezas realizadas en casa no consiguen desobstruir completamente esta parte.

- El tercer motivo tiene que ver con los desajustes que pueden producirse en el dispositivo por golpes involuntarios, ya que es una época en la que se quita y se pone el audífono con relativa frecuencia (antes y después de los baños, para su limpieza, para evitar el calor…) Al manipularlo más a menudo el riesgo de pequeños golpes por caída es más elevado y si éstos se producen pueden dañar algún componente del audífono.

- Finalmente, el cuarto y último motivo tiene que ver con el estado de la pila ya que el calor acelera su desgaste y puede ser que la pérdida de potencia conlleve una pérdida de volumen y ausencia de escucha en determinadas frecuencias.